El jueves, 25 de agosto, se dio a conocer la tasa de desempleo de julio. El encabezado del comunicado de prensa del INEGI dice “la tasa de desocupación se ubicó en 5.27 por ciento en julio”. Inmediatamente después dice “la tasa de desocupación de julio, con datos desestacionalizados a nivel nacional fue de 5.27 por ciento respecto a la Población Económicamente Activa (PEA), tasa inferior en -0.50 puntos porcentuales a la de junio pasado”. En el segundo párrafo del boletín se dice “a nivel nacional, la tasa de desocupación fue de 5.62 por ciento de la PEA en julio de 2011, porcentaje inferior al que se presentó en julio de 2010, cuando se situó en 5.70 por ciento”.
¿Qué nos dice el INEGI? La noticia tiende a ser algo favorable, ya que en términos desestacionalizados la tasa disminuyó respecto al mes anterior y en su serie original fue menor a la de hace un año. Tampoco fue una gran noticia, ya que (a un dígito) la tasa desestacionalizada fue igual a la del promedio del año.
Antes de cualquier cosa habría que aclarar que la tasa más relevante es la desestacionalizada, ya que quita el ruido (que es bastante) de las variaciones que ocurren mes a mes debido a la estacionalidad. ¿Qué significa esto? Es usual que el desempleo disminuye en diciembre ya que hay una mayor demanda de trabajos por las ventas navideñas y el hecho de que hay más gasto a raíz de los aguinaldos. También es común que aumente el desempleo al acabar el ciclo escolar a fines de junio, ya que salen muchos jóvenes de la escuela a buscar trabajo a partir de julio. Finalmente, podemos observar menos desempleo en los segundo y cuarto trimestres y más en los primer y tercer trimestres, ya que obedece a las mismas fluctuaciones que vemos en la actividad económica. Si no tomamos en cuenta estas fluctuaciones repetitivas de cada año, pudiéramos llegar a conclusiones erróneas. Por lo mismo, lo mejor es primero observar la tasa desestacionalizada, que podemos comparar con el mes anterior.
Si después queremos ver que dice la tasa en su serie original (sin desestacionalizar), debemos estar conscientes que no lo podemos comparar con el mes anterior, sino lo correcto es hacerlo con un mes similar, es decir, el mismo mes del año anterior (o anteriores). Tampoco lo podemos comparar con todos los meses que van del año, ya que no sabemos si su variación es por un efecto estacional o porque el mercado laboral sufrió un cambio relacionado con las condiciones macroeconómicas del país.
Por ejemplo, de los primeros siete meses del año, resulta que julio siempre tiene la tasa más elevada. Si observamos los datos sin tomar esto en cuenta, podemos llegar a la conclusión peligrosa (y errónea) que la tasa de desempleo es la más alta del año debido a un deterioro en la economía. Precisamente por esto es que únicamente podemos comparar esta tasa con la del mismo mes del año anterior.
En resumen, la tasa de desempleo en julio disminuyó cinco décimas respecto al mes anterior (que es bueno), después de quitar las variaciones puramente estacionales, mientras que resulto una décima menor a la del mismo mes del año anterior (que también es bueno) si consideramos la serie original. Pero a pesar de esta mejoría marginal, el desempleo sigue relativamente elevado ya que todavía estamos en una fase de recuperación posterior a la crisis de 2008-2009 y la tasa se ubica muy por arriba de su promedio histórico (que es 3.86 por ciento del 2000 a la fecha). La tendencia (que es lo más importante) es a la baja, aunque muy lentamente.
Ahora, ¿cómo la reportaron los medios? Si fuéramos medio obsesivos y nos pusiéramos a consultar todas las noticias de televisión, radio, medios escritos e internet, quedaríamos complemente confundidos y altamente desinformados. De entrada, la mayoría reportaron un deterioro en la tasa de desempleo, ignorando el encabezado del comunicado que pone en primer relieve la tasa desestacionalizada. El enfoque principal es la tasa en su serie original comparada con la del mes anterior. Algunos toman esta tasa y dicen que es la más alta en lo que va del año. Absolutamente nadie menciona que todos los años aumenta en julio por lo que es un fenómeno estacional normal.
Si uno ve las noticias en la televisión, seguramente escuchó que Adriana Pérez Cañedo en el Canal Once dijo que “el desempleo en el país registró en el mes de julio la tasa más alta en lo que va del año”. En cambio, si prefiere a Joaquín López Doriga de Televisa, vimos que “baja el desempleo en México”. Hannia Novel del Canal 40 dijo que “el desempleo en el país está en su punto más alto”. Enrique Campos del Canal 4 nos informó que en julio la tasa de desocupación fue “la más alta de los últimos nueve meses”.
Si prefiere el radio, oyó a Jacobo Zabludovsky en el 88.1 de FM decir que “la tasa de desocupación en México es de más 5.6 por ciento, esto significa que la población económica activa está sin empleo”. Carlos González de Formato 21 dijo “sube el desempleo en México” y Adela Micha en Imagen Informativa informó que “julio fue el mes con mayor desempleo en lo que va del año”. Pero Carlos Urdiales de Radio 13 dijo “que es una tasa inferior en medio punto porcentual a la de junio” y Denise Maerker transmitió que “durante julio la tasa de desempleo en México se ubicó en 5.27 por ciento”.
Quizás uno debe concentrarse en los medios escritos para evitar confundirse. El Universal, Reforma, La Razón y Excélsior reportaron aumento en el desempleo, mientras que El Economista, Milenio Diario, La Crónica y La Prensa dicen que bajó. Pedro Alonso en su columna del Excélsior dice que “este porcentaje se encuentra en el nivel piso de nuestra condición estructural” (sin embargo, si observamos tasas mensuales de 1987 a la fecha, ésta se ubica muy por arriba de todos los meses con las excepciones de 1995-1996 y 2009-2010, años de crisis). Lindsay Esquivel en la Crónica escribe que “la tasa de desempleo se incrementó en 5.83%”.
¿En internet? Para que le sigo…