Eduardo Sojo

En la exposición de motivos de la Reforma Constitucional que otorgó la autonomía al Banco de México hacia fines de 1993, se estableció la necesidad de quitarle al banco central la responsabilidad del Índice Nacional de Precios al Consumidor. La idea fue pasarla al INEGI, pero primero habría que otorgarle su autonomía. Sin embargo, pasaron muchos años para que el Ejecutivo le diera la importancia merecida y que los partidos políticos se pusieran de acuerdo. No fue hasta principios de 2006 cuando se reformó el artículo 26 de la Constitución que dio pie a la autonomía del INEGI y hasta abril de 2008 que finalmente se aprobara la Ley del Sistema Nacional de Estadística y Geografía, que entró en vigor a partir de julio de 2008. Al final, resultó una ley complicada y en muchos aspectos deficiente, pero por lo menos ya teníamos un INEGI más o menos autónomo.

El Presidente Felipe Calderón designó a Eduardo Sojo Garza-Aldape como primer presidente de la Junta de Gobierno, para un periodo del 27 de agosto de 2008 al 31 de diciembre de 2009. La finalidad de este periodo irregular fue para que los periodos subsecuentes de seis años comenzaran en el cuarto año del periodo presidencial como marcaba la ley. Al concluir su periodo, el Senado ratificó el nombramiento de Sojo para un segundo periodo, ya regular, del 1 de enero de 2010 al 31 de diciembre de 2015. Dado que la Ley limita a los miembros de la Junta hasta por dos ocasiones, Sojo terminará su gestión al final de este año y el Presidente de la República tendrá que proponer a una nueva persona. Esto último es una verdadera lástima, ya que el mejor candidato para dirigir al INEGI por los siguientes seis años es Eduardo Sojo.

Sojo es oriundo de León, Guanajuato. Al concluir sus estudios de licenciatura en Economía en el Tec de Monterrey, entró a trabajar como analista en la Dirección General de Economía Política y Social de la Secretaría de Programación y Presupuesto. En 1982 fue a estudiar su doctorado a la Universidad de Pennsylvania, donde trabajó con Lawrence Klein (Premio Nobel de Economía 1980) en proyectos que combinaban modelos econométricos con series de tiempo. A mediados de la década regresa a México y se incorpora al INEGI como Director Técnico. En el INEGI ocupó diversos puestos y realizó una carrera de casi 15 años, en la cual acumuló mucha experiencia y conocimiento de primera mano de las estadísticas mexicanas y del manejo institucional del mismo.

Hacia fines de los noventa decide dejar el INEGI e incorporarse al Tec de Monterrey como Profesor e Investigador en el campus de León, Guanajuato. Allí fue invitado por Vicente Fox como asesor en su campaña a Gobernador del Estado y después como coordinador del gabinete económico del gobierno de Guanajuato. Cuando Fox asume la presidencia, lo invita a ser su Jefe de Asesores. En 2006 se incorpora a la campaña presidencial de Felipe Calderón y posteriormente es nombrado Secretario de Economía cuando empieza el sexenio. Cuando el INEGI logra su autonomía en 2008, la designación de Eduardo Sojo como su Presidente era lógico, pues tenía la experiencia, el conocimiento y el manejo político necesario para el puesto.

Pero Sojo tenía más que eso. Tenía un entusiasmo y ganas de hacer del INEGI uno de los mejores institutos de estadística del mundo. Tenía la actitud ideal de ser buena gente, abierto a la crítica, dispuesto a escuchar y lo suficientemente inteligente como para saber cómo empujar los proyectos necesarios. Una de sus frases favoritas era que había que ver la crítica como asesoría gratis. Es una verdadera lástima que la ley limita la gestión de Sojo a un poco más de siete años, cuando dudo que haya un candidato más idóneo en todo el país que él.

La autonomía del INEGI todavía no ha cuajado del todo. Necesita más consolidación y dirección. En lo personal estoy realmente preocupado por la terna que pudiera considerar el Presidente para este puesto tan importante. Imagínense si pone a un amigo del Estado de México, un funcionario que le diga solo lo que quiere escuchar como en la Secretaría de la Función Pública, o alguien simplemente irrelevante para el puesto. Para mi este nombramiento es más importante que la mayoría de las secretarías. He escuchado a dos o tres nombres que verdaderamente me asustan.

¿Cuáles son las cualidades que se necesitan? Básicamente tres: 1) experiencia y conocimiento del manejo de las estadísticas y del INEGI, 2) buen manejo político de instituciones y de personas, y 3) una actitud abierta con visión, inteligencia y ser una buena persona. En otras palabras, un clon de Eduardo Sojo.

2 comentarios en “Eduardo Sojo”

  1. Totalmente de acuerdo con los comentarios sobre el Dr. Eduardo Sojo, pero no me gusta el calificativo de buena persona, procuraría mejorar el adjetivo y diría que es una persona con gran sensibilidad humana.

  2. alberto illingworth

    Aunque un poco demasiado tarde, comparto plenamente la opinion de Jonathan Heath. Un saludo a Eduardo y Jonathan. Personajes que tengo el honor de conocer y que admiro profundamente.

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