La marcha de la actividad econ贸mica en la primera mitad del a帽o fue sorprendente, ya que la famosa desaceleraci贸n (o incluso hasta recesi贸n) que se esperaba nunca lleg贸. Los crecimientos de los dos primeros trimestres de 0.7 y 0.6 por ciento, respectivamente, no fueron muy diferentes al del 煤ltimo trimestre de 2016 de 0.7 por ciento. Aun as铆, hay muchos analistas que anticipaban un paso m谩s lento en la segunda mitad de este a帽o, antes de poner en la ecuaci贸n los efectos del temblor del 19 de septiembre. Estamos a pocos d铆as de concluir el tercer trimestre y nos preguntamos de que si hay evidencia de una desaceleraci贸n y si tendremos que realizar alg煤n ajuste ante los 煤ltimos acontecimientos.
La primera observaci贸n es, aunque hemos mantenido el paso en estos 煤ltimos trimestres, la composici贸n del PIB por el lado del gasto s铆 ha cambiado. En 2016, el componente m谩s din谩mico fue el consumo de los hogares, mientras que la inversi贸n y las exportaciones (que hab铆an sido lo m谩s din谩mico en 2015) presentaron una desaceleraci贸n significativa. Empez贸 el a帽o con una expectativa muy pesimista ante la llegada de Trump, el gasolinazo y un m谩ximo hist贸rico en el tipo de cambio, pero al finalizar el primer trimestre vimos que la actividad econ贸mica se hab铆a mantenido. La verdad es que s铆 hubo una desaceleraci贸n marginal en el consumo privado y tasas negativas en el gasto p煤blico, tanto en el consumo de gobierno como en la inversi贸n p煤blica, y en la inversi贸n privada. Lo que nos salvo fue un comportamiento muy favorable (y sorpresivo) en las exportaciones, que tuvieron su mejor crecimiento trimestral de los 煤ltimos diez trimestres y el tercer mejor desde principios de 2010. En otras palabras, tuvimos casi el mismo crecimiento del trimestre anterior, pero con una composici贸n muy diferente.
Para el segundo trimestre vimos de nuevo que se mantuvo el ritmo de la actividad econ贸mica, pero de nuevo con una composici贸n muy distinta. Ahora vimos una aceleraci贸n importante en el consumo de los hogares, una recuperaci贸n marginal en el consumo de gobierno, una mejor铆a en la inversi贸n privada (aunque no extraordinaria) y una ca铆da en las exportaciones. Otra vez sorprendi贸 este comportamiento, ya que se hab铆a anticipado que las exportaciones ser铆an el motor principal de crecimiento, mientras que el consumo privado seguir铆a desaceler谩ndose. Sin embargo, se hizo notar la apreciaci贸n de la moneda y algo menos de crecimiento en la producci贸n manufacturera de Estados Unidos, que frenaron las exportaciones. Por el lado del consumo, aument贸 significativamente la adquisici贸n de bienes importados y creci贸 el gasto en servicios, pero se estanc贸 el consumo de bienes de origen nacional. Igual, es posible que la disminuci贸n en el tipo de cambio tuvo algo que ver.
Las primeras noticias del tercer trimestre no son buenos. El INEGI anunci贸 el lunes pasado que la actividad econ贸mica global (IGAE) de julio disminuy贸 -0.7 por ciento respecto al mes anterior, mediante ca铆das en las tres principales clasificaciones de actividades. Las actividades primarias disminuyeron -1.6 por ciento, las secundarias -1.0 por ciento y las terciarias -0.1 por ciento. No tenemos todav铆a mucha informaci贸n de agosto y sabemos que es muy probable que septiembre sufre alguna afectaci贸n por el temblor del 19. Muchos establecimientos permanecieron cerrados, aunque fuera por algunos d铆as, en varios estados de la Rep煤blica, por lo que pudi茅ramos anticipar que el IGAE de septiembre tenga una tasa negativa o por lo menos muy cercano a cero. Esto nos hace pensar que el trimestre en su conjunto s铆 va mostrar una desaceleraci贸n.
No obstante, el efecto final del temblor sobre la actividad econ贸mica global no ser谩 tan negativa. Seguro veremos una recuperaci贸n importante en el cuarto trimestre en sectores claves como la construcci贸n, con la contrapartida de disminuciones en otros sectores como de ciertos servicios. No tendr铆amos porque esperar una afectaci贸n en la manufactura ni en la exportaci贸n. Al final, es posible esperar un nivel similar en la actividad econ贸mica en la segunda mitad del a帽o, pero de nuevo, con una composici贸n muy diferente.
En principio, estar铆a de acuerdo con mantener la misma expectativa de crecimiento para el a帽o o en su defecto, restarle 0.1 por ciento. Lo que pudiera marcar la diferencia ser谩n las exportaciones. 驴Seguir谩n retrocediendo o se recuperar谩n?