La semana pasada, leí la noticia de que el gobierno había anunciado que el empleo aumentó 36 por ciento en junio. Lo primero que pensé fue que, obviamente, la cifra está equivocada, ya que por su simple magnitud es imposible. En ese momento mi razonamiento era una de dos: se les fue el punto decimal, por lo que la tasa de crecimiento del empleo registrado con el IMSS fue 3.6 por ciento (respecto al mismo mes del año pasado), o bien, se refieren al crecimiento de los últimos diez años. De inmediato empecé a revisar las cifras y encontré que cualquiera de las dos opciones era plausible, ya que la tasa anual de crecimiento del empleo en junio fue 3.5 por ciento, mientras que el crecimiento de los últimos diez años fue 35.3 por ciento.
En seguida, busque el comunicado de prensa del IMSS (10 de julio) y lo leí con mucho cuidado. En ningún lugar mencionan dicha cifra. Se habla de las variaciones en la generación de empleo desde distintos ángulos, pero la única tasa de crecimiento que se menciona es la de la tasa anual de los puestos de trabajo, que se eleva de 3.2 por ciento en el mes anterior a 3.5 por ciento en junio de 2014. La cifra empezó a ser cuestionada en Twitter, ya que era un error muy marcada. Finalmente resultó que la tasa de 36 por ciento es el cambio porcentual del cambio absoluto del primer semestre de 2014 respecto al primer semestre del año anterior.
En Twitter se dijo que la fuente fue una declaración de la SHCP, aunque ya no lo pude comprobar. De ser cierto, es candidato al “Oso del Año” en la categoría de declaraciones desafortunados de funcionarios públicos. Sería otro buen ejemplo de cómo el gobierno busca manipular las cifras para tratar de verse bien y convencer al público no iniciado de que el rumbo de la economía va mejorando. Sin embargo, tampoco me sorprendería de que fuera el cálculo de algún reportero o analista que no sabe mucho de tasas de crecimiento. Pero independientemente de dónde surgió la cifra, es buen ejemplo de cómo las estadísticas se pueden manipular para decir casi lo que uno quiere.
Sí es cierto que el empleo registrado en el IMSS empieza a mostrar cierta recuperación. Después de llegar a un pico de 745 mil empleos creados en un periodo de doce meses en noviembre de 2012, habíamos observado una tendencia a la baja que llegó a su punto mínimo de 441 mil en enero de este año. A partir de entonces el número de asegurados con empleo retoma una tendencia alcista y ahora en junio es la primera vez que la generación anual de empleos (de 571 mil) es mayor al monto de doce meses antes. De seguir la tendencia es posible llegar a fin de año con una generación de empleos mayor a los 650 mil (el consenso de la Encuesta de Expectativas de Especialistas del Sector Privado de Banxico es de 648 mil).
No obstante, hay que tener mucho cuidado con las cifras del IMSS al tomarlas como proxy del empleo formal del país. De entrada, no incluye a los trabajadores del gobierno federal y de la mayoría de los de los estados y municipios (con las excepciones de los afiliados a las modalidades 36,38 y 42). Tampoco incluye al “asegurado no trabajador”, que si está bien no incluir a los pensionados, estudiantes y familiares que no tienen trabajo, sí debería incluir a los que sí lo tienen (por ejemplo, hay muchos pensionados que siguen trabajando).
Al mismo tiempo, se debe considerar que un alta en el IMSS no necesariamente implica la creación de un nuevo trabajo. Por ejemplo, soy un profesionista independiente desde hace tiempo y hace unos meses me incorporé al IMSS bajo la modalidad 40 de “continuación voluntaria”; aumentó el número de afiliados pero sin generar empleo. En este mes di de alta a una persona que realiza servicios domésticos bajo la modalidad 34; igual, aumenta el número de afiliados pero no significa que hubo la creación de un empleo.
La siguiente consideración (y seguramente la más importante) es en la calidad de empleo mismo. Si revisamos las cifras de los asegurados por nivel de ingreso, encontramos que en los últimos años hay una pérdida de empleos bien renumerados (mayores a cinco salarios mínimos), mientras que la gran mayoría de los nuevos empleos son de ingresos bajos. Si la recuperación del empleo es mediante salarios más bajos (y menos productivos), no crecerá mucho la masa salarial, lo que a su vez no dejará que crezca mucho el consumo de los hogares. Al final de cuentas, limitará la inversión y el crecimiento económico en general.
Nuestro problema laboral nunca ha sido el desempleo, sino más bien la calidad de empleos. En este sentido, parece que estamos retrocediendo.
Estimado Sr. Heat, desconozco qué nota haya leído usted y de cuál fuente. Lo que está mal es la nota que usted leyó o lo que a usted se le quedó grabada de la nota. Ya que veo que usted mismo desconoce de lo que está hablando, ya que ni siquiera puede ubicar la fuente de la cifra de la que trata su nota, con gusto la señalo por usted. La cifra fue mencionada por el Presidente el 16 de julio. Lo que el Presidente dijo fue: «En el primer semestre de este año se han generado 403 mil empleos en nuestro país […] Que esta cifra es 36 por ciento superior a la generada en el mismo periodo del año pasado, que supera en 108 mil empleos más los que se generaron en el semestre del año anterior.» (fuente: http://www.presidencia.gob.mx/articulos-prensa/palabras-del-presidente-de-los-estados-unidos-mexicanos-licenciado-enrique-pena-nieto-durante-la-inauguracion-de-la-planta-de-pet-reciclado-grado-alimenticio-mas-grande-del-mundo/). Esto que mencionó el Presidente fue retomado exactamente por medios como El Economista (http://eleconomista.com.mx/industrias/2014/07/16/empleo-crecio-36-primer-semestre-pena-nieto). Si uno mira las cifras de trabajadores registrados en el IMSS proporcionadas por la STPS, verá que 36% del Presidente se refería al número de nuevos trabajadores registrados en el IMSS y que el 36% es correcto. Claramente, a usted el 36% le parece increíble pero eso es porque no sabía a qué se refería ese porcentaje, siendo que el Presidente lo indicó apropiadamente (aunque a él le faltó decir que eran trabajadores del IMSS cosa que omite, incorrectamente, en sus discursos). Le sugiero ser más selectivo con sus fuentes (siempre puede usted recurrir a buenas fuentes como El Economista) para no andar dando «osos» por ni siquiera poder ubicar la fuente de las cifras que comenta. Un saludo.
No seas ingenuo, conozco perfectamente bien de lo que estoy hablando. Usar una tasa de crecimiento de un cambio absoluto para «mostrar» que el empleo creció 36% es francamente una estupidez. En esta ocasión, EPN estuvo muy mal asesorado.
El dato lo dio Enrique Peña Nieto durante la puesta en operación de una planta de PET reciclado, de la empresa Coca Cola, en la ciudad de Toluca.
Ya tiene nombre y apellido el candidato al oso del año.
Saludos.
Estimado Jonathan Heath, recomíendeles leer su libro «lo que indican los indicadores» para que se den una idea de por qué es una estupidez manejar como tasa de crecimiento ese 36%.