El INEGI dio a conocer los resultados del Sistema de Indicadores Cíclicos para marzo: el indicador coincidente aumentó 0.04 puntos respecto al mes anterior, mientras que el indicador adelantado registró 0.13 puntos más. Dado que ambos se ubican por arriba de su tendencia de largo plazo y están en aumento, el INEGI reporta que la economía mexicana se ubica en una fase de expansión. El coincidente refleja el estado general actual de la economía, mientras que el adelantado busca señalar anticipadamente la trayectoria del coincidente. Incluso, el INEGI nos anticipa que el adelantado en abril es 0.08 puntos más que el de marzo.
Según el INEGI, el Sistema de Indicadores Cíclicos se genera con una metodología compatible con la utilizada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), por lo que permite realizar comparaciones con diversas economías a nivel mundial. Pero lo que no señala es que la metodología es distinta a la empleada comúnmente en Estados Unidos, por lo que tenemos que tener mucho cuidado con las comparaciones. Mientras que el INEGI utiliza ciclos de crecimiento, en Estados Unidos se utiliza los ciclos clásicos. La NBER (www.nber.org) fue el organismo que definió hace como 80 años los términos y definiciones de los ciclos económicos y es diferente a la empleada por la OCDE. Claro, podemos ver los cálculos de la OCDE para Estados Unidos para compáralos con México, pero en la mayoría de los casos no lo hacemos.
Aunque discretamente (no lo menciona en su boletín de prensa), el INEGI sigue publicando los cálculos combatibles con los ciclos clásicos. El indicador coincidente clásico arrojó un valor de 113.5 en marzo, un incremento de 1.34% respecto a abril. Pero lo más importante es que el dato está a un punto decimal de 113.6, el valor máximo registrado en enero de 2008. Esto significa que estamos a punto de concluir la fase de recuperación para empezar una nueva expansión.
Aquí es justamente la diferencia entre estas dos escuelas. Según el ciclo de crecimiento del INEGI, empezamos una fase de expansión en febrero de 2011, por lo que ya tenemos 14 meses creciendo por encima de la tendencia de largo plazo. La economía llegó a su pico en mayo de 2008 (terminó la expansión anterior) e inició una fase de desaceleración de seis meses, para después entrar en recesión a partir de noviembre de 2011. La recesión duró 8 meses y empezó la siguiente fase de recuperación a partir de julio de 2009.
Pero según la escuela clásica de los ciclos económicos, la recesión empezó en enero de 2008, duró 17 meses y empezó la de recuperación en mayo de 2009. En marzo de 2012 cumple 35 meses y todavía no hemos iniciado una nueva fase de expansión. Todo indica que esto va ocurrir a partir de abril, por lo que terminaremos con esta fase después de 36 meses, la de mayor duración desde que tenemos cifras comparables (de 1980 a la fecha).
¿Por qué arrojan resultados y fechas diferentes? La escuela de ciclos de crecimiento define los ciclos a partir de las desviaciones de la tendencia de largo plazo de la economía. El problema es que no nos dice que es la tendencia, sino simplemente nos lo igual a 100. En principio, podríamos estar en una fase de expansión (de crecimiento) simplemente porque disminuyó la tendencia de largo plazo y no porque estamos creciendo más. La tendencia de largo plazo es equivalente al concepto de PIB potencial que utilizan los economistas y se define como el máximo crecimiento que puede tener una economía sin generar presiones inflacionarias.
Debemos tener cuidado con las comparaciones, ya que cuando los economistas de Estados Unidos se refieren a que la recuperación de la crisis de 2008-2009 fue la más larga desde la Segunda Guerra Mundial, se refiere al ciclo clásico. Por lo mismo, no debemos compararla con la recuperación de 19 meses que reporta el INEGI, sino con la de 36 meses según la escuela clásica.
Para los interesados en mayor detalle acerca de los dos enfoques, les recomiendo el capítulo tres del libro “Lo que Indican los Indicadores”, que se puede descargar gratuitamente de la página del INEGI.